En: Inspiración, La Guía
Una Tiny House para negocio en teoría sería lo opuesto al propósito de construirla, ya que la casa es la conclusión de una filosofía de vida enfocada en la funcionalidad, y de vivir en ella para emplear el tiempo y el espacio de otra manera.
Pero también qué bobada volverse esclavo de principios y reflexiones, si tiene los recursos y quiere entrar en el medio del turismo y hospedaje la parte «romántica» de construir y vivir en una Tiny House pasa a un segundo plano. Lo digo porque muchas personas nos han buscado para pedir consejos pero al final lo que buscan es simplemente motivación para llevar a cabo su proyecto mientras perciban que de alguna manera les va a entrar plata sin mucho esfuerzo.
Las razones no importan,salvo el hecho de que lo hicimos en su momento por necesidad. Lo que vale la pena entender si quiere desarrollar un negocio con Tiny Houses es la relación de costos y beneficios de este tipo de proyectos, porque a simple vista parece tan fácil como construir (o mandar a hacer) la casa, ponerla en Airbnb o Booking y sentarse a esperar a que le consignen.
Lo cual aparte de falso puede ser un poco irresponsable.
La característica de una Tiny House es la funcionalidad. Decir que una cabaña es una Tiny House por lo pequeña es como decir que una carpa es Glamping porque tiene un baño al lado.
Es decir que se diseña un concepto de vivienda tan funcional que ocupa muy poco espacio y permite vivir de manera permanente. Esta funcionalidad en la mayoría de los casos responde a las necesidades particulares de sus dueños, porque el espacio que funciona para una persona puede ser muy incómodo para otra.
Una solución para estadías cortas por su parte requiere mucho menos recursos y soluciones de espacio, de manera que mi consejo personal es que invierta mejor en más unidades de estadía corta que en Tiny Houses, a menos que quiera construir un condominio para vivienda permanente (que ya deja de ser turismo para ser inmobiliaria).
En otras palabras con lo que construye una sola Tiny House para negocio podría construir 3 cabañas, Glamping o como lo quiera llamar.
Hace unos años algún empresario con visión y un lote pensó en importar una burbuja de plástico y adecuarla para dormir en medio de la naturaleza cobijado por las estrellas, ahora Glamping y Domo transparente con Jacuzzi y fogata significan exactamente lo mismo.
En la medida que el Boom de las Tiny Houses siga creciendo, hospedarse en una Tiny House será la regla (no la excepción) que en términos de intervención al entorno puede ser muy perjudicial, a menos que dentro de toda la «cuquería» de dormir en una casa chiquitica sirva como ejemplo de eficiencia ambiental implementando sistemas alternativos para la energía eléctrica, acueducto y alcantarillado.
Y bueno, creo que no puedo ser más honesto al respecto y pienso que es preferible conocer el lado realista de este tipo de proyectos que andar presumiendo del «idilio» de vivir y trabajar fuera de la ciudad que por cierto es chévere, pero no es para nada idílico.